domingo, 28 de febrero de 2010

HECHO EN CASA: SALMÓN MARINADO-AHUMADO


Una vez que pruebas esto del salmón marinado en casa, dejas de comprar el salmón envasado que sale doblado como el cartón, y vale una pasta, porque es TAN fácil .................. como tener un poco de paciencia y seguir las instrucciones del paquete.

Marinar no tiene nada que ver con ahumar, pero en este caso, esta técnica del marinado, al ser con sal ahumada, nos da al salmón ese adorado buquet y el resultado es que está buenísimo.



Aquellos que no tengan ganas de probar con este preparado que venden en Mercadona, han de saber que lo único que tienen que hacer es mezclar azúcar y sal gorda a partes iguales, o incluso sólo con sal gorda, con el inconveniente de que sino se dispone de sal ahumada, el resultado será el clásico salmón marinado (o gravad lacks, absolutamente delicioso) y no esta versión que presento hoy con este toque ahumado.

No lo considero una receta propiamente, pero quiero animaros a probar esta técnica y este producto con su paso a paso, porque realmente merece la pena para nuestro paladar y nuestro bolsillo. El resultado será muy sabroso y muy tierno. Mi última recomendación: no excedáis los tiempos de marinado.

SALMÓN AHUMADO-MARINADO
1 lomo de salmón limpio de grasa y bien recortado
1 paquete de sal especial de sal para marinar (de venta en supermercados)
un poco de eneldo fresco picado o en su defecto seco
unas pinzas de depilar
una fuente honda o una bandeja
papel film
1 tabla
peso para la tabla


El lomo debe estar limpio de grasa y bien recortado por los laterales. Lavar el salmón y secarlo bien con papel de cocina.


Quitar al salmón las espinas con la pinza de depilar, cuidando de no dejar ninguna pues después del marinado es imposible sacarlas y nos dificultan el corte.


Espolvorear el salmón con eneldo fresco picado finamente.


Podemos usar una bandeja o una fuente algo honda donde nos quepa la pieza holgadamente, forrada con papel film para luego hacer el paquete. Extendemos parte del producto para formar un lecho sobre el que pondremos nuestro salmón con la piel hacia abajo. Cubriremos con una capa de 1 cm de grosor (aprox) del producto procurando que todo el salmón esté bien cubierto.


Una vez bien cerrado el paquete, todo lo apretado que podamos, le colocamos una tabla y peso encima y lo llevamos a la nevera por 24 horas.

Pasado el tiempo de marinado indicado, enjuagamos nuestro lomo bajo el grifo y le quitamos toda la sal. Lo secamos muy bien con papel de cocina y lo dejamos airear unos minutos antes de introducirlo nuevamente en la nevera para el reposo final. Así es como queda un lomo de salmón al final del proceso.
Al ser marinado es una semiconserva, pero para degustar una pieza tan grande durante mucho tiempo sin que se nos estropee, aconsejo congelarlo lo suficiente como para cortarlo finamente con comodidad. Introducir las lonchas en un recipiente y cubrirlas con aceite de oliva. Tapado se conserva perfectamente en la nevera y siempre podeís tener a vuestra disposición un delicioso y casero salmón ahumado.

domingo, 21 de febrero de 2010

COMIDA FAMILIAR: BRAZO DE PAVO RELLENO Y SALSA DE OREJONES


Quiero agradecer desde aquí a Roma62, forera de MR, el haber facilitado su receta de rollo de carne con un paso a paso muy ilustrativo, que yo he tuneado a mi manera y que me ha dado como resultado este delicioso brazo de carne que hoy os presento.

Me ha gustado la forma de prepararlo, estilo brazo de gitano, y la forma de hornearlo, en un paquete que no ensucia el horno. Aunque yo le puse una capa de lonchas de queso, la próxima vez prescindiré de ésta, no le hace falta en absoluto.

En esta ocasión lo he acompañado de una salsa de orejones, pero el sabor suave de la carne admite cualquier salsa.


BRAZO DE PAVO RELLENO, para ver la receta original pincha aquí.
200 gr. queso feta
200 gr. de bacon
300 gr. de jamón york
4 huevos
1 kg de carne de pavo picada (en mi caso 2 muslos deshuesados)
láminas de jamónyork para rellenar
lonchas de queso havarti para rellenar (prescindible)
pimienta y sal
1 bote de piñones
ciruelas sin hueso

Pedir en la carnicería que nos pasen dos veces por la picadora la carne de pavo junto con el bacon y el jamón de york. Picar el queso finamente y añadirlo a la mezcla junto con los huevos batidos, sal y pimienta. Amasar hasta que todo esté integrado y dejar reposar unas horas en la nevera para que gane consistencia.

Dividir la masa en dos y colocar una de las porciones sobre un papel de horno. Colocar otro pliego encima y estirar la masa con un rodillo hasta conseguir un rectángulo muy fina, de 1/2 cm de grosor. Retirar uno de los pliegos y extender una capa de jamón york y otra de queso. Luego repartimos la mitad de los piñones y unas ciruelas troceadas groseramente. Con el mismo papel, nos ayudamos para formar un rollo que envolvemos en el mismo papel dejándolo bien apretado y cerrado (como si fuera un brazo de gitano). Repetimos esta operación con el resto de la carne y formamos otro rollo. Los colocamos en la bandeja del horno y los horneamos a 180º unos 50 minutos. Si los paquetes están bien cerrados todos los jugos se quedaran dentro y no ensuciarán la bandeja. Listo para servir.

Se pueden hacer 4 rollos más pequeños y congelarlos para irlos sacando a medida que los vayamos necesitando y probar así distintas salsas de acompañamiento. Yo los hice para Navidad con antelación y los congelé. El día que nos lo comimos estaba jugoso y tierno, como recién hecho.


SALSA DE OREJONES
1 bolsita de orejones - 1 bolsita de ciruelas sin hueso - 1/2 bolsita de pasas sin huesos - vino dulce para macerar las frutas - 3 Cucharadas de aceite - 1 cebolla grande - 4 zanahorias - 700 ml. agua

Primero ponemos a macerar las frutas en un cuenco cubriéndolas con el vino dulce durante unas horas. En una cazuela ponemos el aceite, la cebolla troceada y las zanahorias en rodajitas y se deja pochar a fuego lento. Añadimos las frutas con el vino y dejamos que de un hervor. Luego añadimos el agua y dejamos reducir la salsa unos 15 minutos a fuego medio. La salsa se puede servir así tal cual, con los tropezones, o triturada.

jueves, 11 de febrero de 2010

GALLETAS POR SAN VALENTÍN: CORAZONES MULATOS Y CORAZONES ENAMORADOS


Sí, sí, el amor es lo más importante, insisto, aunque podemos festejarlo todos los días o cualquier día, lo cierto es que la mayoría de nosotros no lo hacemos. Creo que San Valentín es además una buena oportunidad para poner un poco de ilusión en nuestras vidas en la recta final del invierno, cuando ya estamos cansados de tantas borrascas y frentes fríos, del paraguas, del abrigo, de los calcetines mojados......

Una propuesta chocolateada para los amantes del...... chocolate (¡¡es que somos tantos....!!). El amor no se puede entender sin chocolate, será porque dicen que al comerlo se libera no se que sustancia que nos da cierta felicidad, será también por eso por lo que es tan adictivo (uy uy uy.....). Por lo que sea, el chocolate es romántico, tentador y excitante, y he aquí estas "galletas mulatas" para los que les gustan las emociones fuertes.

La otra propuesta es para los románticos, para los enamoradizos, para los que tienen chispitas y mariposas en la barriga, para los que quieran demostrar un cariño especial. Son unas aromáticas "galletas enamoradas" con chispitas de amor crujientes.

¡Ay, cómo me gusta San Valentín! Será que Cupido, el Dios del Amor, es un ser alado como yo.....




GALLETAS CORAZÓN MULATO, sin gluten
1 huevo
1 yema
1 Cucharada de azúcar vainillada
125 gr. de azúcar
1 Cucharada colmada de Café Capuchino instántáneo (yo Hacendado)
50 gr. de fideos de chocolate
250 gr. de almendra molida (2 paquetes Hacendado)
50 gr. de cobertura de chocolate con leche
corazones de chocolate negro para adornar

En un cuenco mezclamos el huevo, la yema, el azúcar, el café, los fideos y la harina de almendra hasta que esté todo bien integrado y hayamos formado una masa compacta, si nos queda un poco pegajosa añadimos un poco más de almendra. Ponemos la masa sobre un pliego de papel de hornear y con otro pliego encima estiramos con el rodillo hasta obtener un grosor de 1 cm. Cortamos con el cortapastas y colocamos los corazones en una bandeja de horno forrada con papel. Horneamos 35 minutos a 140ºC. Sacamos del horno y dejamos enfriar en una rejilla. Mientras se enfrían, derretimos el chocolate de cobertura al baño María y vamos pincelandos las galletas con el chocolate y les vamos colocando el corazón de chocolate negro. Dejar enfriar completamente, hasta que se endurezca la cobertura.

El resultado son unas galletas muy crujientes.



GALLETAS CORAZÓN ENAMORADO
75 gr. de mantequilla blanda
100 gr. de azúcar
1 Cucharada de azúcar vainillada
1 pellizco de sal
ralladura de 1 limón (el mío era uno bien gordo)
1 cucharadita de aroma de vainilla
1 huevo
2 yemas
200 gr. harina
2 Cucharadas colmadas de almendras molidas
1 cucharadita rasa de levadura
50-100 gr de azúcar granulada y colorante rojo

En un recipiente ponemos la mantequilla, el azúcar normal y el vanillado, la ralladura de limón y la pizca de sal y batimos con las barillas eléctricas hasta que se esponje y tenga un color blanquecino. Añadimos el huevo y 1 yema y batimos. Mezclamos la harina, las almendras y la levadura y lo añadimos a la mezcla anterior. Amasamos (no batimos) hasta que esté todo bien integrado y vertemos la masa en un papel film. Cerramos bien y dejamos reposar en la nevera al menos 2 horas. Es una masa muy floja.

Mientras tanto teñimos el azúcar: ponemos el azúcar en una bolsita (esas para las meriendas de los niños sirven perfectamente) y echamos unas gotas de colorante. Rápidamente frotamos la bolsa para que se impregne todo el azúcar. Repetir la operación hasta obtener el color deseado. Reservar.

Sacamos la masa de la nevera y la estiramos con el rodillo entre dos pliegos de papel de hornear hasta quedarla con un espesor de 1/2 cm. Con ayuda de dos cortapastas de corazón (uno más grande y otro más pequeño) damos forma a la masa. Batimos la yema que nos queda con 1 cucharadita de agua y pintamos las galletas. Las decoramos con el azúcar teñido y las horneamos durante 15 minutos a 175ºC. Si son dos bandejas, a mitad del tiempo abrimos el horno y las cambiamos de sitio. Poner las galletas sobre una rejilla y dejar enfriar.

Resultan unas galletas muy aromáticas y ligeras, una delicia........

lunes, 8 de febrero de 2010

PARA ENAMORADOS: BOMBONES RAFFAELLO


Se acerca el día de San Valentín, una excusa comercial para unos o un día para acordarse de aquellos a los que aprecias para otros...... los más jóvenes tendrán además un motivo para hacer bonitas fiestas en rojo y rosa, los colores del amor y los enamorados.......

En fin, aunque sea un día muy bien aprovechado por los comercios y grandes almacenes, ¿no es el amor lo que verdaderamente más nos importa a todos? ¿no es el objetivo de nuestra vida el amar y ser amados? ¿no es el amor el motor del universo, lo que nos hacer sentirnos vivos? El amor en todas sus intensidades ¿no es maravilloso?

Para demostrar mis aprecios he hecho estos deliciosos bombones Raffaello, sin chocolate, de coco tentador y con un corazón crujiente, que voy a repartir a mis amigos y familiares. ¿Os animáis?


BOMBONES RAFFAELLO O "RAFFAELLOS"
250 gr. de coco rallado + 100 gr. más para rebozar
1 bote pequeño de leche condensada, en mi caso Hacendado
3 Cucharadas de almendra molida
1 cucharadita de extracto de vainilla
1 paquete de avellanas
En un cuenco mezclamos los 250 gr. de coco, con la leche condensada, la almendra molida y la vainilla. Dejar reposar en la nevera unas horas o mejor, de un día para otro. Para entonces la masa estará bastante firme. Con ayuda de una cucharilla cogemos pequeñas porciones de masa, ponemos una avellana en el centro y formamos una bolita. Rebozamos las bolitas nuevamente en coco y colocamos en las cápsulas de papel. Es recomendable que estén refrigerados antes de servir, porque sino la masa se ablanda.

domingo, 7 de febrero de 2010

CON AMIGAS: PASTAS DE TE CON AVELLANAS


Una vez al mes nos reunimos las amigas para una larga jornada de charla y risas. Un día para recordar, para reirse de todo lo que se mueve y para dar un repaso a los últimos acontecimientos. Estamos todas tan ocupadas que hemos instituido esta fórmula para mantener el contacto...... bueno, en realidad cualquier escusa es buena para reunirse con las amigas.

En cada ocasión quedamos en una casa diferente, así las anfitrionas nos vamos turnando y se hace más liviano eso de tener invitados, porque el trabajo y los niños (bueno, y los no tan niños) no dejan apenas tiempo para florituras. Aun así, todas nos esforzados en preparar nuestra tarde especial como mejor sabemos.

Este mes ha tocado en mi casa y he preparado una sesión de té muy británica, para la que he hecho especialmente unas pastas deliciosas, con una presencia inmejorable y muy sencillas de hacer a la vez. Han sido un éxito total y ¡menos mal que nos las hemos comido entre todas!, mi línea no resistiría que sobrara alguna porque al final me las termino comiendo yo.......

PASTAS DE TE CON AVELLANAS
250 gr. de harina
125 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
125 gr. de azucar glas
1 huevo
1 Cucharada de agua de azahar
avellanas
2-3 Cucharadas de café capuchino en polvo (en mi caso Hacendado)300 gr. de chocolate con leche de cobertura

Volcar la harina en un cuenco grande. Repartir la mantequilla en trocitos y añadir el azúcar, el agua de azahar y el huevo. Amasar hasta formar una bola y dejar reposar 1 hora en la nevera envuelta en papel film. Pasado ese tiempo, sobre una superficie ligeramente enharinada estiramos con un rodillo un trozo de masa, el resto mientras a la nevera, hasta que tenga un grosor aprox. de 1/2 centímetros. Cortar con un molde, en este caso de flor, tantas galletas como se pueda y depositarlas sobre una bandeja de horno forrada con papel de hornear. Repetir esta operación hasta consumir toda la masa. Una vez que tenemos todas las galletas cortadas colocamos una avellana en el centro de cada una, hundiéndola ligeramente en la masa. Seguidamente ponemos los polvos del capuchino instantáneo en un colador fino y espolvoreamos las galletas. Horneamos las galletas a 200ºC durante 10 minutos. Las pasamos a una rejilla para que se enfríen bien. Derretimos al baño maría el chocolate de cobertura y lo vertemos en una bolsita. Cortamos una esquinita de la bolsita y usándola como una manga pastelera, zigzageamos el chocolate sobre las galletas para la decoración final. Dejar enfriar completamente antes de servir.